Cuando se acerca el invierno y, después de tener la calefacción de su hogar apagada todo el verano, ha llegado el momento de ponerla en marcha. Una serie de sencillos consejos y comprobaciones bastan para que disfrute de inmediato de su calefacción con economía, confort y seguridad.
Estos pasos constituyen una sencilla comprobación del sistema:
- La caldera debe estar en la posición de invierno/calefacción.
- Compruebe el estado de las pilas en los elementos que pueden precisarlas (termostatos, mandos, sondas, etc.).
- Encienda el termostato, recuerde que para que la calefacción funcione la temperatura seleccionada debe ser superior a la de la habitación donde se encuentra.
- Mantenga una temperatura constante y moderada. Conviene tener la calefacción entre 18 y 21ºC durante el día (cada grado de temperatura aumenta o reduce el consumo en un 7%).
- Compruebe que los radiadores están abiertos y la ausencia de fugas en el circuito de radiadores.
Con un simple examen visual usted puede comprobar la ausencia de manchas y goteos debidos a desajustes, holguras o juntas defectuosas que son un claro aviso de posibles fugas. La solución puede precisar la intervención del Servicio Técnico Oficial en el teléfono 971.19.18.32. - Purgue los radiadores: Este sencillo proceso consiste en expulsar todo el aire que puede permanecer alojado en las diferentes zonas del circuito de radiadores dificultando el calentamiento de los mismos.
Con la calefacción encendida y la presión del circuito correcta, actúe sobre todos los radiadores, uno por uno, aflojando el tornillo de purgado hasta que salga un chorro de agua o de ambos a borbotones. Un chorro continuo de agua indicará la ausencia de aire en cada radiador y el momento de cerrar su purgador correspondiente. La pérdida de aire y parte del agua del circuito puede haber provocado un descenso de la presión. Por lo tanto compruebe el manómetro y si el nivel de presión es bajo repita el llenado.
- Compruebe la presión: Antes de poner en funcionamiento la caldera compruebe que la presión es aproximadamente 1 bar. Si la presión es baja, ponga agua al circuito empleando la llave de llenado de la caldera hasta alcanzar la presión indicada en el manual.
En caso de una presión superior a 1 bar reduzca la carga de agua mediante la llave de vaciado o, sencillamente, purgando un radiador. Ponga la caldera en modo invierno y actúe sobre el termostato demandando una temperatura más alta, con ello arrancará la caldera y tras 10 o 15 minutos los radiadores comenzarán a calentarse. Ya con la calefacción en marcha compruebe en el manómetro de la caldera la presión de agua de la instalación está entre 1 y 2 bar.
Si es más alta la presión, una vez fría la instalación, proceda como al inicio reduciendo la cantidad de agua del circuito. Si por el contrario, incluso en caliente está cerca de 1 bar, proceda a introducir agua hasta alcanzar la presión de 1 bar.
Y si su caldera no ha estado en funcionamiento previamente, tenga en cuenta las tres comprobaciones siguientes:
- Abra la llave de paso del agua.
- Abra la llave de paso del gas y compruebe que hay gas.
- Compruebe si la caldera está enchufada y si llega corriente.
Su caldera ya está lista para cuidar de usted y de su familia durante todo el invierno.
Llámenos si necesita asesoramiento en alguno de los pasos al teléfono 971 19 18 32.